Palazzo Vecchio: El Médico y la Granduquesa.

En el Estudio de Francesco I no son raras las referencias a las ciencias y las virtudes curativas de las sustancias naturales; sabemos además que en los armarios de este Guardarropa de cosas raras y preciosas, el Granduque conservaba también medicamentos y remedios, mientras que el el techo y la parte superior de las paredes está pintada en fresco la teoría de los cuatro elementos constituyentes del macrocosmos y del hombre: Aire, Agua, Tierra y Fuego.

Para entender la Civilización de Renacimiento es importante conocer algo de la concepción de la Naturaleza y los conceptos de salud y enfermedad. Protagonista de la piece Gerolamo Mercuriale, quizás el más famoso médico físico de la segunda mitad del siglo XVI, que hace una visita a la Granduquesa Cristina de Lorena, esposa de Ferdinando I de’ Medici, enferma. El diagnóstico es morbo de mal aere.

En la piece – y en el sucesivo confronto del público con Mercuriale – se resalta como los médicos de la era moderna, sin conocer la existencia de bacterias y virus y sin instrumentos para los análisis diagnósticos sofisticados actuales, fueran capaces de hacer diagnósticos con una perspicacia sorprendente y conocían las virtudes curativas de cientos de plantas: casi el ochenta por ciento de los principios activos de los fármacos actuales.